CARTA
DE LA DIRECTORA
Un
espacio para el análisis
Esthela
Gutiérrez Garza
La
historia que transcurre, nos aproxima de manera insoslayable a
un acontecimiento extraordinario que es la llegada del nuevo milenio.
Este momento se realiza en el marco de un proceso de cambios y
transformaciones profundos que avanzan hacia la constitución
de un nuevo orden económico, político y social en
el mundo.
No sólo se verifica la formación de nuevos bloques
de hegemonía geopolítica entre las naciones como
la Unión Económica Europea, el Tratado de Libre
Comercio de Norteamérica y la Asociación de Naciones
del Sudeste Asiático que se disputan la hegemonía
mundial; sino que, además, con la reaparición del
liberalismo económico en los ochenta, se han profundizado
las diferencias de desarrollo entre los países ricos y
los pobres, destacando en particular el rezago económico
cada vez más grande del continente africano.
En este contexto, nuevos acontecimientos se han desarrollado.
Entre ellos, el derrumbe de los países socialistas, la
desintegración de la Unión Soviética, la
polarización del fundamentalismo religioso en Medio Oriente
y la reaparición de viejos nacionalismos como lo ocurrido
en la antigua Yugoslavia, son muestras de estas transformaciones
múltiples por las que atraviesan actualmente las naciones
en un nuevo espacio conocido como la globalización.
Las transformaciones ocurren también en las estructuras
económicas, sociales y políticas en un contexto
de cambios vertiginosos que rompen los viejos paradigmas de comprensión
del conocimiento y requieren, para la elaboración de un
diagnóstico correcto, de nuevas contribuciones teóricas
capaces de señalar los caminos alternativos a seguir en
la conformación de este nuevo orden internacional que impliquen
el menor costo social para la población en el mundo.
Ciertamente, la introducción de la microelectrónica
en los procesos productivos, la aparición del dinero cibernético
en el movimiento de capitales especulativos, el papel hegemónico
de los recursos humanos en la disputa por la competitividad, el
cuestionamiento del Estado del bienestar, el predominio de una
concepción de democracia liberal despojada de los principios
de compromiso social, el deterioro ecológico del planeta,
la escasez de alimentos para un sector cada vez más amplio
de la humanidad, el empobrecimiento del sistema de valores en
los que descansa nuestra moderna civilización, constituyen
realidades que requieren cada vez más de una visión
integral y totalizadora de nuestro entorno.
Frente a tales acontecimientos, los científicos sociales
estamos destinados a desempeñar una función trascendente.
Es necesario redoblar los esfuerzos de reflexión e investigación
científica que nos permitan realizar diagnósticos
realistas de la compleja situación social en que vivimos;
elaborar paradigmas teóricos que integren los principios
de eficiencia económica con valores éticos, democráticos
y sociales que potencien el desarrollo integral del ser humano;
fortalecer la capacidad orgánica intelectual en el mundo
con el fin último de elaborar propuestas de prospectiva
general que sirvan para orientar los esfuerzos de construcción
y fortalecimiento de sociedades plurales y democráticas,
con amplio sentido de compromiso y justicia social y fincadas
en modelos de bonanza económica que respeten el desarrollo
sustentable del planeta.
Comprometida con lo anterior, la Universidad Autónoma de
Nuevo León en México ha abierto un espacio editorial,
Trayectorias, a todos los estudiosos de las ciencias sociales
que deseen incorporarse a los trabajos de consolidación
de una agenda académica sólida, crítica y
vigorosa, capaz de acompañar con conocimiento y sensibilidad
los trayectos de nuestra historia.
Dra.
Esthela Gutiérrez Garza
Directora